El pontífice recibió al mandatario latinoamericano en uno de los salones del Aula Pablo VI, en la que fue la primera visita de Díaz-Canel a la Santa Sede como presidente.
El papa Francisco y el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, reforzaron hoy en el Vaticano “una muy buena relación” con una audiencia privada de 40 minutos, informaron fuentes vaticanas a Télam.
El pontífice recibió al mandatario latinoamericano en uno de los salones del Aula Pablo VI, en la que fue la primera visita de Díaz-Canel a la Santa Sede como presidente, tras haber asistido a la entronización papal en marzo de 2013 cuando era Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado.
La reunión, plantearon fuentes vaticanas a Télam, reforzó la “muy buena relación” entre los dos jefes de Estado.
La reunión, tras la que el Papa le obsequió el Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz y otros libros de su pontificado, fue la cuarta cara a cara entre ambos, tras la visita de 2013 y los encuentros en Cuba en 2015 y 2016, durante visitas de Jorge Bergoglio.
Díaz-Canel, en tanto, le regaló al Papa una escultura en plata, bronce y madera, titulada “El Lector”, y dos volúmenes de poetas cubanos.
Tras reunirse con el Papa, Díaz-Canel se entrevistó con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal italiano Pietro Parolin, con quien habló “de la importancia de las relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y Cuba, evocando la histórica visita de San Juan Pablo II en 1998, de la que se cumple el 25 aniversario”, según planteó un comunicado oficial.
“A continuación, se detuvieron en la situación del país y en la contribución que ofrece la Iglesia, especialmente en el ámbito de la caridad. En la continuación de la conversación, se tocaron algunos temas internacionales de interés mutuo y se subrayó la importancia de mantener el compromiso de promover siempre el bien común”, añadió la nota vaticana.
El vínculo entre la Santa Sede y Cuba quedó reforzado luego del rol central que jugó Francisco en 2014 para el denominado “deshielo” del vínculo diplomático de la isla con Estados Unidos, un avance bilateral logrado durante el Gobierno del presidente Barack Obama que luego fue suspendido con el del presidente Donald Trump.
En la misma sala, en 2015, el Papa recibió al entonces mandatario Raúl Castro, en tanto que mañana, el pontífice recibirá al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.